Visitar México es una maravilla. Hay tanto que ver y conocer, que el tiempo es el peor enemigo en un viaje de placer. He ido en algunas oportunidades a la tierra de los mayas; desde cuando la Capital se llamaba el DF., hoy "Ciudad de México".
En estas líneas dejaré algo que me impresionó; su gente. Los mexicanos tienen magia e historia. El talento de sus artistas, el cine, los cantantes, las telenovelas y como si fuera poco tienen tradiciones espectaculares.
Uno de mis viajes coincidió con la celebración del día de los muertos. ¡Oh sorpresa!, Catrinas por todas partes y la algarabía de honrar a nuestros muertos y celebrar lo efímero que es la vida, en forma burlesca. Recordemos que las Catrinas forman parte de la cultura popular de México y se ha convertido en el símbolo por excelencia de la celebración de esta fecha. En su cultura , la Catrina es una persona elegante y de buen vestir, típica de la aristocracia del siglo XIX. Envuelve al personaje el sarcasmo, símbolos de la muerte y la enorme sonrisa dibujada en el rostro.
Me divertí tanto que de a poco me iba confundiendo con los mexicanos en el desfile por todo San Ángel; comparsas, rituales y los grandes altares con ofrendas y coloridos. Para los mexicanos esta fiesta es la representación de la cultura popular para hacer burla tanto a los vivos como a los muertos, así como recordar que "todos nos vamos a ir". Es la celebración de la vida y una burla a la muerte. “La muerte es democrática, ya que a fin de cuentas, güera, morena, rica o pobre, toda la gente acaba siendo calavera”, decía el caricaturista José Guadalupe Posada, haciendo una completa referencia a su más famoso personaje; la Catrina.
La historia de la Catrina en México
Empieza durante los gobiernos de Benito Juárez, Sebastián Lerdo de Tejada y Porfirio Díaz. En estos periodos se empezaron a popularizar textos escritos por la clase media que criticaban a la situación del país como a las clases privilegiadas. Los escritos, redactados de manera burlona y acompañados de dibujos de cráneos y esqueletos, se empezaron a reproducir en los periódicos llamados de combate.
En la cultura maya existe una “huesuda” a la cual se refería la gente antigua, pero relacionada con una hechicera que se despojaba de sus carnes para hacer sus embrujos.
